22 de marzo de 2016

Almacenamiento de leche

Una vez que extraemos leche, es hora de almacenarla (puedes leer todo acerca de la extracción de leche haciendo clic aquí). ¿Cómo la guardo para que mi bebé la pueda tomar después? 

Apenas te la saques en el trabajo puedes meterla en botellitas con la tapa bien cerrada o en bolsitas herméticas para la conservación de leche. Si tienes un refrigerador a la mano las puedes poner ahí, o sino en un cooler con ice-packs para que se mantenga heladita. 

La leche, cuando está guardada en fresca y en frío, se separa. La grasa suele irse hacia arriba y formar una capa gruesa o varios grumos de nata. Esto no quiere decir que esté mala, simplemente mézclala antes de calentarla para dársela a tu bebé.


¿Cuánta leche debo meter en una bolsita? Idealmente entre 4 y 6 onzas, y siempre escribiéndoles la fecha del día que la extrajiste. También aprieta el aire que queda dentro para que estén lo más selladas posibles.

Si te extraes leche puedes guardarla en la refrigeradora (sin congelarla, en la parte de abajo) para el día siguiente. Puede estar en la refrigeradora hasta 5 días.

Si vas a congelar leche, cuando las pongas en la refrigeradora, ponlas echadas para que se congelen planitas y puedas almacenar más (si las pones así nomás se hacen unas pelotas de hielo que son bien difíciles de acomodar en la refri)

Esa leche no deberías usarla para el diario: esa leche es para casos especiales. Una emergencia, un día que llegaste tarde por el tráfico, alguna vez que te enfermaste, etc. Ahí la persona a cargo de tu bebé cuando no estás la puede sacar y descongelar. 

Para descongelar esa leche, primero bájala a la parte baja de la refrigeradora para que se descongele lentamente, y luego la puedes calentar en baño María. 

Algo que a mí me ha pasado varias veces es que las bolsas congeladas se golpean en la refrigeradora (y se hacen huequitos o se rasgan). Cuando las descongelo empiezan a gotear y muchas veces no me doy cuenta hasta que ya es muy tarde y se chorrea gran parte de mi leche. Por eso empecé a ponerlas en la parte de abajo dentro un bowl - por lo menos si se derraman, la leche queda en el bowl.

Para calentar leche materna nunca uses el microondas, siempre en baño María. Nunca vuelvas a congelar leche descongelada, o a recalentar leche que ya calentaste 1 vez. 

Si la descongelas o calientas y "huele raro", podría ser lipase. Lee más acerca del lipase aquí.

Otra cosa que me pasa es que descongelo leche y de ahí es demasiado. Por eso, recomiendo calentar poquito (2 ó 3 oz) y si el bebé quiere más le das más. Pero si calentaste mucho, y ya no la quiere, esa leche hay que descartarla (y todas sabemos el dolor de ver tu leche yéndose por el caño).

Les dejo un cuadrito para saber cuánto tiempo dura la leche que extraemos. La leche congelada tiene un tiempo de duración mayor. Si se conserva más que los tiempos recomendados no es que se va a malograr, solo se degrada al perder lípidos y tiene una menor calidad, pero aún está buena.


Jenny

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